Soy un simple sacerdote católico. Me siento feliz y orgulloso de mi vocación. Hace veinte años que vivo en Angola como misionero”.
Así comienza una carta que el misionero salesiano uruguayo Martín Lasarte envió al New York Times sin obtener respuesta. En la misma, explica la labor silenciosa en favor de los más desfavorecidos de la mayoría de los sacerdotes de la Iglesia católica que, sin embargo, “no es noticia".
El Salmo 22: Un Eco Profético en la Cruz
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Los Evangelios, meticulosos en su relato de los eventos que rodearon la
vida de Jesús, registran sus palabras en griego, a pesar de que él, en su
vida terr...
Hace 17 horas
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